206 expertos del mundo concordaron en una cosa: la grandeza de esta ficción
Un detective irritado se aleja del cadáver de un joven afroamericano que está tirado en la calle, a merced del frío y del olvido. Un muerto más de la semana, del mes, que se diluirá en las cifras de los homicidios del año. El detective le pregunta a otro chico, testigo de los hechos, qué fue lo que pasó.
"Cuando jugábamos cartas, él intentaba robar el dinero y salía huyendo. Le dábamos una paliza y seguíamos con nuestras vidas. Pero esta vez le dispararon", afirma el joven. El detective entonces le pregunta lo más lógico: ¿por qué lo dejaban jugar con ellos? "Porque esto es Estados Unidos, viejo".
Así resume "The Wire" a la Unión Americana y así comienza la serie creada por el expolicía Ed Burns y el experiodista David Simon que desde su estreno en 2002, ha cosechado el reconocimiento de expertos, audiencias, y de realizadores de la industria como una de las mejores series de televisión de la historia, y tras un censo realizado por BBC a más de 206 críticos de todo el mundo, es considerada como la mejor serie del siglo XXI.
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"The Wire" comprende a un grupo de detectives de la ciudad de Baltimore encargados de tirar el imperio de drogas de un pandillero, pero también es la historia de estos “delincuentes”, así como de otros personajes de los tugurios donde se mueven. También es una historia de los políticos y su insensibilidad y corrupción; igualmente de los periodistas que buscan reportar lo que acontece. Y de los niños que crecen en medio de esta “zona de guerra”.
"No hay serie moderna que retrate mejor la variedad de enfermedades asediando al experimento estadounidense, desde sus líderes ineficientes a sus políticas tóxicas; la desaparición de la oferta laboral; vecindarios golpeados por la pobreza y el racismo sistemático", escribió Eric Deggans para el medio encargado del censo.
Durante su trasmisión, la serie fue ninguneada por las audiencias, así como también por la misma industria, no cosechando premios en los Emmys, ni siquiera en los debatibles Globos de Oro. Y en más de una ocasión, HBO consideró cancelarla. Por fortuna, pudo concluir con 5 temporadas que si bien son imperfectas, representan en sus logros la mejor calidad que una ficción puede llegar a aspirar.
Parte de eso se debe a su realismo al momento de retratar sus problemáticas sociales. Atendiendo una mirada panorámica, analiza los sistemas que están sometidos por las drogas: desde la policía hasta los políticos, desde los trabajadores del transporte hasta los pandilleros de los barrios marginales, metiéndose a las escuelas y el papel que juegan los medios de comunicación, nadie queda indemne de este análisis dramático que cala por su resonancia hoy en día.
Una serie de policías que lejos de retratarlos como héroes, como grandes servidores públicos, los refleja como peones, meros soldados encaminados a brutalizar a las personas de los barrios pobres en donde el crimen es la única opción para sobrevivir. Y en Estados Unidos, el racismo apunta a que estos sitios sean en su mayoría habitados por gente de color.
“Nos presentó una visión de una comunidad asfixiada por sus problemas, que es incapaz de reconocerlos, mucho menos resolver", agrega Deggans en su nota.
Si en México hubiese alguien con el talento y el valor de hacer algo así, el país entero se habría venido abajo. Porque "The Wire" grita verdades no evidentes, pero sí reconocibles para cualquiera que ha reflexionado sobre las injusticias que ocurren en su entorno y se pregunta cómo es que las cosas pudieron llegar a ese punto. La serie ofrece una respuesta que quita el sueño, pero con una argumentación convincente: Nadie está a salvo, todos son culpables.
La serie comppleta en su versión remasterizada se encuentra disponible bajo suscripción mensual en HBO Max.
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