Según estimaciones, resulta más barato cargar los vehículos de diesel y gasolina
En la actualidad la industria automotriz vive un punto de inflexión con la llegada de los vehículos eléctricos al mercado, pues estos se han establecido como la promesa que salve a la industria durante los próximos años de ajustes para mitigar la crisis climática.
En ese sentido, Noruega figura como uno de los países que más se ha volcado a favor de esta iniciativa, con cifras récord en cuanto a vehículos eléctricos nuevos entre su población. Tan sólo en junio del 2021, el país nórdico registraba 11,722 autos de este tipo, lo que representa una participación del 78.7% de las ventas totales tan sólo ese mes.
En cuanto a las ventas generales, el país contó con un 80% a favor de los vehículos electrónicos. Sin embargo, estos números positivos podrían sufrir un retroceso en el futuro ante uno de los problemas recientes con este tipo de vehículos: las recargas eléctricas.
Los cárgadores públicos de Oslo, capital de Noruega y ciudad que ha sido apodada como "el paraíso" de los automóviles eléctricos, han aumentado de forma importante sus precios de recargas, según el nuevo presupuesto del país para este servicio, de acuerdo con el periódico Avisa Oslo.
Se triplican
La mayor parte de los precios alcanzaron un aumento de casi el triple, quedando el precio más bajo de 35 coronas por hora (alrededor de 70 pesos), de acuerdo con el medio.
Desde hace 3 años, Oslo comenzó a cobrarles a sus residentes por cada recarga de vehículso eléctricos. Ante esta creciente demanda, los precios se fijaron entre 5 y 15 coronas por hora (10 y 30 pesos mexicanos, aproximadanente), siempre en función de la cantidad de kilovatios que el cargador público fuera capaz de entregar, así como la hora del día en la que se hiciera la recarga.
Estos costos se han incrementado durante las horas altas de la tarde y noche, donde los precios han crecido ahsta siete veces en menos de cuatro años.
¿Qué hará el gobierno de Noruega para regular la situación?
La Asociación de Vehículos Eléctricos de ese país (llamada Norsk elbiforening) ha expresado frente a los precios elevados que no puede seguir recomendado a los habitantes de Oslo que compren autos eléctricos, pues las recargas de estos se han vuelto insostenibles y en el gran esquema de las cosas, mucho más costosas que las recargas de los vehículos de combustible.
Tras ejercer presión para una mejora en los precios, el Ayuntamiento de la capital de Noruega buscará adoptar nuevos precios para la carga pública en las calles de Oslo, si bien estos aún no han sido establecidos. Pese a esta medida, se espera que los precios no varíen mucho, si bien reducirían su coste a comparación de la tabla fijada a principios de este mes, donde actualmente resulta más del doble de caro recargar un auto eléctrico que uno de gasolina.
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