Jordan Turpin ahora es una joven tiktoker como cualquier otra, pero con una historia detrás de abusos físicos y emocionales por parte de sus padres.
Jordan Turpin ahora tiene una cuenta de TikTok y como a otras jóvenes, le gustan las canciones de Britney Spears, Lil Nas X, Nicki Minaj y Hannah Montana, pero nadie se imaginaba que de pequeña hubiera vivido una vida de abuso junto a sus 12 hermanos hasta que a sus 21 años ha decidido contar su historia a ABC News.
Jordan salvó a sus 12 hermanos de los maltratos de sus padres, Louise y David Turpin, el día en que a sus 17 años decidió escapar y llamar a la policía para que los rescatara de los abusos físicos y emocionales a los que los tenían sometidos.
Así maltrataban a sus hijos los Turpin
David y Louise Turpin tuvieron trece hijos que en 2019 tenían entre dos y 29 años a quienes maltrataron desde que fueron pequeños: los encarcelaban, golpeaban, estrangulaban, les daban de comer una vez al día, los dejaban bañarse una vez al año, les ponían la misma ropa sin lavar todos los días, abusaban sexualmente de ellos y los ataban con cadenas a la cama.
Jordan tenía mucho miedo de llamar a la policía o de intentar escapar y que la atraparan por el castigo que le iba a esperar si lo hacía, pero pensó que había estado tantas veces cerca de la muerte que prefería morir en el intento que seguir viviendo esa vida.
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Cómo escapó Jordan Turpin
Jordan salió por la ventana del dormitorio de su casa en Perris, California durante la noche. Llevaba consigo un celular con el que sólo se podían hacer llamadas de emergencia, así que llamó al 911.
La niña no conocía los nombres de las calles y ni siquiera sabía que debía caminar por la acera, así que avanzó en dirección desconocida mientras hablaba con la operadora para contarle que necesitaba ayuda para rescatar a sus hermanos, pero que no sabía cuál era su dirección ni dónde estaba. Con trabajo pudo hacer la llamada, pues nunca había hablado por teléfono.
En estas condiciones vivían los hermanos Turpin
La policía logró encontrarla y se sorprendió de que la joven pareciera más joven de lo que era por la desnutrición. Luego acudieron a su casa con el pretexto de que entregarían un cheque de bienestar y pudieron descubrir que la casa apestaba a mascotas muertas, comida, excremento humano y basura.
Encontraron a tres niños encadenados a su cama y los demás tenían moretones en los brazos, estaban desnutridos y carecían de conocimientos básicos.
Los padres fueron acusados de 12 cargos de tortura, 12 cargos de encarcelamiento falso, siete cargos de abuso de un adulto dependiente, seis cargos de abuso infantil, uno por abuso sexual a un menor de 14 años y fueron condenados a cadena perpetua con posibilidad de libertad condicional pasados los 25 años.
Los niños Turpin ahora son víctimas de la violencia estructural, pues viven en la miseria en barrios con mucha violencia y sin poder acceder al dinero que extraños han donado para ellos.
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