Sobrepasaba las dimensiones de un camión de pasajeros
A veces olvidamos que los dinosaurios fueron auténticos monstruos gigantes que caminaron libres sobre la Tierra mucho antes que nosotros, por lo que los descubrimientos de fósiles que nos permiten imaginar más sobre su paso en el mundo generan gran interés entre la población.
Recientemente los restos de un animal que sólo podría haber existido en la imaginación de un autor de ciencia-ficción salieron a relucir tras una reciente investigación científica; este dinosaurio anduvo por las tierras de lo que actualmente es China hace 162 millones de años.
Se trata del Mamenchisaurus sinocanadorum, el dinosaurio y ser vivo con el mayor cuello del que se tenga registro, alcanzando casi 15 metros de longitud, al menos, en lo que se encuentra otro especimen que lo supere en tamaño. Pertenecía a la familia de los saurópodos.
La gran altura del cuello de este dinosaurio cuadrípedo es seis veces mayor al promedio de las jirafas contemporáneas, además de que su longitud es equivalente a un camión y medio de pasajeros.
Parte de una investigación
El descubrimiento formó parte de una investigación acerca de la historia evolutiva del Mamenchisauridae, una familia de dinosaurios de grandes cuellos que viajaron por el este de Asia y posiblemente otras zonas del mundo entre 174 y 114 millones de años atrás.
Los restos se encontraron en la región autónoma de Xinjiang Uyghur, noreste de China, en 1987.
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Como es de suponerse, este tipo de dinosaurio mantenía sus grandes proporciones debido a su cuello, ya que para tener la suficiente energía que permitiera mover su cuerpo, el Mamenchisaurus debía reunir grandes cantidades de comida. Su cuello largo era una respuesta para permanecer en una fuente de alimento recolectando la mayor cantidad de plantas, lo cual le permitía ahorrar sus fuerzas.
Otra de las teorías alrededor de porqué este saurópodo tenía un cuello tan largo era porque así podía redistribuir su calor corporal de forma óptima, como sucede hoy en día con las orejas de los elefantes.
Sin embargo, la información de este tipo de especie permanece en una incógnita debido a la dificultad de encontrar pruebas fósiles que contribuyan a su estudio. La causa se debe a que este tipo de animal es difícil que permanezca enterrado en sedimento, primer paso vital para el proceso de fosilización.
Por ello, las estimaciones sobre la verdadera longitud de su cuello son meramente especulaciones, sin embargo, el Mamenchisaurido representa una especie importante porque empujaron los cálculos de qué tan alargado podía ser el cuello de un saurópodo, según paleontólogos.
La cuestión de cómo pudieron los saurópodos evolucionar al grado de poseer un cuello tan extenso es una de las que busca responder un estudio reciente publicado en la revista "Journal of Systematic Palaeontology".
¿Cómo han podido estudiarlos?
Los investigadores detrás de desentrañar la vida y complexiones de los Mamenchisaurus han tenido que usar tomografías computacionales (CT, por sus siglas en inglés) para encontrar el peso de su vértebras, el cual era ligero, así como espacios dentro de su cuello para respirar que comprendían del 69 al 77% de su volumen, lo cual es similar a la forma en que el cuello de las aves se constituye.
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