Uno de los principales motivos por los que Netflix puede no funcionar a 1080p a Chrome o Firefox es que, por defecto, Netflix está configurado para optimizar automáticamente la calidad del video en función de la fuerza de su conexión de red.
Si tu conexión de red es lenta (es decir, un ancho de banda bajo), Netflix ajustará automáticamente la calidad del sonido y del vídeo a un nivel que tu velocidad de Internet admita, de forma que puedas obtener una experiencia de transmisión de video suave sin una memoria intermedia constante.
A pesar de ello. Puede ajustar manualmente la calidad del vídeo en la configuración de la cuenta de Netflix para que no optimice automáticamente el vídeo para su conexión de red. Si cambia la configuración, puede mantenerla a 1080p constante, aunque puede experimentar un poco de memoria intermedia.
Cambiar la configuración de la calidad del video en Netflix es realmente muy sencillo:
- Abre el navegador web, ve a Netflix, y accede a tu cuenta de Netflix.
- Una vez que hayas iniciado la sesión en Netflix, haz clic en el icono del perfil en el extremo superior derecho y, a continuación, selecciona el enlace que dice cuenta.
- En la parte inferior de la página, selecciona el archivo Configuración de la reproducción enlace. Aquí es donde verás que, por defecto, está definido automático, donde ajustará automáticamente la calidad del vídeo en función de la intensidad de la red.
Verá tres opciones, para configurarlas:
bajo – bajo es de calidad de video básica, probablemente esté muy por debajo de 720p. Usar escasos 0,3 GB por hora mientras se reproduce en tiempo real, posiblemente inferior.
medio – medio la calidad debería estar alrededor de los 720p. Se utiliza un poco más, con 0,7 GB por hora de video visto.
alto – alto es, obviamente, lo mejor que obtendrá en cuanto a calidad de vídeo. Si tiene un plan de alta definición, alto utilizará aproximadamente 3 GB por hora, pero si se ha registrado en Ultra HD, busque unos 7 GB por hora de vídeo visto.