La compañía estadunidense ejerció un manejo condenable, según filtraciones a los medios
La compañía de viajes por aplicación, Uber, protagonizó una polémica luego de que el periódico The Guardian revelara algunas de las prácticas reprochables que ejerció en distintos países de 2013 a 2017, tras analizar más de 124 mil documentos filtrados al medio británico. El caso ha sido demoninado "Uber Files", e involucra a mandatarios de potencias económicas. El período de la filtración comprende a la dirigencia de Travis Kalanick, expresidente de la compañía.
Entre las revelaciones, destaca el que Uber buscara el apoyo de la clase política en algunas naciones para garantizar su éxito; promover la confrontación con manifestaciones violentas de taxistas, aún cuando sus conductores corrían riesgos y ejercer prácticas ilegales, tales como eliminar datos valiosos de sus sistemas para evitar compartirlos con las autoridades en diversas ocasiones.
En la nota, se menciona cómo el presidente de Francia, Emmanuel Macron, favoreció a la compañía entre sus grupos cercanos para que Uber obtuviera el respaldo del gobierno francés, cuando el político era secretario de economía en ese país. También se menciona cómo Joe Biden, presidente de EUA, concertó una reunión con Kalanick en la que el entonces vicepresidente era criticado por llegar tarde.
Destacó también el nombramiento del actual canciller de Alemania, Olaf Scholz. Cuando era alcalde de Hamburgo, indicó a la compañía que implementara el salario mínimo entre sus conductores, por lo que un ejecutivo de Uber le calificó como "un buen comediante".
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"La violencia garantiza el éxito"
Las filtraciones fueron hechas por Mark MacGann, antiguo lobista de la empresa para la región de Europa, quien afirmó deberes morales detrás de sus acciones. El esquema de trabajo de Uber se especula, fue pieza clave para que se adentrara en diferentes regiones alrededor del mundo, buscando por rutas no oficiales el respaldo de políticos y de los gobiernos locales, destinando en 2016 la cifra de 90 millones de dólares para "relaciones públicas" y lobbying.
Kalanick, en una conversación filtrada, anuncia como manifestaciones violentas de taxistas en la India eran "buenas para el negocio", pues al confrontarlas, se fortalecía la imagen pública de la compañía, mientras que las de los gremios de transporte sufría el efecto contrario. "La violencia garantiza el éxito", afirmó en un mensaje, sin consideración por la integridad de sus conductores al encarar estas manifestaciones.
Ante el escándalo, la actual administradora de la compañía, Dara Khosrowshahi, afirmó que no negaba ni excusaba el comportamiento de Uber en el pasado, sin embargo, invitaba a la población a mirar los últimos 5 años como un ejemplo del nuevo rumbo que tomó la empresa.
En los próximos días, diversos equipos de periodistas internacionales revelarán más información extraída directamente de los documentos.
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